jueves, 20 de abril de 2017

Carme Chacón.

Creo que a todos los miembros del gobierno de Zapatero les puse mote. No es que me cayeran bien o mal. Era por culpa de su jefe y de la forma de repartir ministerios como quien da cartas al principio de una partida de mus. Me parecía un gobierno de cara a la galería. Más que nada para que le vieran y hablaran de el que de gobernar. Porque, digan lo que digan, Zapatero aún no se cree que hubiera ganado dos elecciones y mucha de la gente de su equipo hubiera llegado tan alto. Pero eso es otro tema.
Salvo el día que hubo el traspaso de cartera, día solemne, creo que nunca la vi sin una sonrisa. Más o menos grande. Pero una sonrisa. De ahí que la llamara la "ministra sonrisa". Desconozco lo que hizo mientras era ministra de Defensa, aparte de visitar a nuestros soldados en el exterior y coger la baja por maternidad (creo que esa fue la única razón por la que una mujer estuvo al frente de un ministerio de los fuertes), claro. Si tengo claro su labor al frente del Ministerio de Vivienda. Nada. Nada de nada. Pero seguía con esa sonrisa que superaba la de Joker de Zapatero. O la de la "ministra niñata". Son de esas sonrisas que despiertan. Que te despiertan. Y así se la recuerda hasta el último momento. Tampoco se la labor que hizo ni en el PSOE ni en el PSC. Ni lo sé ni me importa. Y tampoco sé sí toda la gente que estuvo ayer en el homenaje lo hizo de corazón, para aparentar o para salir en la foto. Viéndola durante estos años, oyéndola durante estos años, uno se da cuenta de lo que se ha perdido. Una mujer tranquila, correcta, sonriente, ... Algo que, en estos momentos, igual necesitaría su partido. Descanse en paz.

P.D.: Me hizo gracia (no por nada más porque hacía tiempo que no la veía) ver a la del acontecimiento planetario. Y faltó gente. O yo, por lo menos, no la vi.

lunes, 3 de abril de 2017

Hablar o decir.

Lo bueno del castellano es que tiene una riqueza lingüística tremenda. Pero hay que saber qué se dice. O saber de qué se habla. Podría sonar lo mismo. Podría. Pero todo depende de quién lo oiga. O de quién lo escuche. Que también podría ser lo mismo. A mí, por ejemplo, no lo es. Igual que en inglés está to look y to see. Ambos verbos significan ver. Aparentemente. Pero, en realidad, uno es ver y otro mirar. Ayudando, por otro lado si llevan preposición o no.
Todo ésto viene a raíz del revuelo que se ha montado por lo de la condena al chico-chica grumete (expresión que usaba el padre de la serie Matrimonio con hijos al dirigirse a su vecina y que yo uso cuando me refiero a alguien que no se si es hombre o mujer. En este caso es porque se dice que es transexual y por su aspecto lo parece) por lo de los tuits relativos al asesinato de Carrero Blanco. Por que no murió sino que le mataron. Hay muchas teorías sobre ello, pero no voy a entrar en ello. Hablar de este tema me lo sugirió un compañero de instituto. Vaya por delante que aún no lo he leído. Aún, digo, porque otra compañera me ha pasado el enlace de la página de El País donde se publican. Fiel a mis principios, escribo acerca de lo que veo, leo u oigo y, como puedo tener ideas equivocadas, sobre todo por lo que no he visto, lo dejo claro. Decidí empezar este artículo antes de leer los tuits pero, antes de ello, he comentado comentarios (los comentarios se comentan con otros comentarios ya que no siempre son respuestas) gracias acerca del asesinato. Aunque también buscaré (porque lo dije) lo que pueda sobre la muerte de Carrero Blanco cosa qué, tras varios días desde que empecé a escribir ésto, aún no he hecho.
Pero, por suerte para mucha gente, cada día sale algún titular en el se habla de alguien que habló de algo pero que no dijo nada. Generalmente el personaje es de la farándula varia, cosa que leo en la prensa escrita, o de la política, que veo en la tele. Pero bueno, como empiezo un artículo aún sin publicar, a uno no le conocen si no hablan de él, ya sea bien o mal. No hablan o no dicen.
Yo, en cambio, escribo lo que pienso pero son otros los que deben interpretar el texto. Para hablar. Para decir. Para pensar. Para nada.